Reportaje

Motociclistas: ‘Sin Dios ni Ley’

Jorge Hernán Gutiérrez
Ixous7@hotmail.com
Lacoladelratón.blogspot.com

Estrellas y más estrellas. Si queremos ver estrellas ya no es necesario esperar la noche para contemplar el cielo; solo tenemos que mirar la tierra y apreciar la cantidad de estrellas no resplandecientes, pero sí negras; negras por los accidentes mortales de tránsito. Negras por la ‘mafia negra’ de las licencias falsas. Negras por las mentes despiadadas de aquellos que no respetan la vida.

Neiva se está convirtiendo en una ciudad ‘estrellada’, pero no porque sus calles sean como las de Hollywood, sino porque la mayoría de esas estrellas andaban sobre ruedas y dejaron su existencia en dicho lugar. El año pasado en la ciudad murieron 34 motociclistas de los 5.409 de todo el país. Y quedaron 844 heridos, de esos 614 conductores y 230 parrilleros.

El incumplimiento de la Ley por algunas escuelas de enseñanza, la falta de autoridad que la haga cumplir y la infracción de éstas por parte de los motociclistas, hacen que estos vehículos circulen por las calles de la ciudad como ruedas sueltas en las vías, ‘sin Dios ni ley’, ocasionando la mayoría de los accidentes de tránsito.

‘Motos, hasta el cuello’
En Neiva circulan aproximadamente 50 mil motos -Según la Secretaria de Tránsito y Transporte Municipal- En los últimos cuatro años los neivanos han comprado 17.500 motos, y en lo que lleva del 2008 va en 5.500 y la tendencia es a 9.000. En los últimos meses se han incrementado las compras de estos vehículos debido a las facilidades que se presentan; y esto de alguna manera u otra, afecta la seguridad vial.

Teniendo en cuenta que la motocicleta es un medio de transporte eficiente y económico, cada día este vehículo se proyecta más como una herramienta de trabajo para miles de neivanos. La eficiencia en movilidad ofrecida por estos vehículos favorece la ejecución de labores como: mensajería, repartición de correo, entregas a domicilio, servicios de reparación, compañías de alarmas, moto-taxis, seguridad privada, en fin.

Un peligro sobre ruedas
A pesar que en la ciudad hay 27 guardas de tránsito y 40 policías que juegan un mismo papel, coordinados por la Secretaria de Tránsito y Transporte del Municipio, las cifras de accidentes siguen en aumento. Y el peligro que están causando las motos en las vías, le están haciendo rascar la cabeza a más de uno, no solo en Neiva, sino en toda la región.

Para el director regional Sur-oriente del Fondo de Prevención Vial, Ángel Erney Bejarano, la accidentalidad asociada a la motocicleta, sí es un grave problema en la ciudad de Neiva. El funcionario presentó cifras como estas: a nivel de muertos se han aumentado en un 33% y a nivel de heridos en un 25%. Esto quiere decir que el grupo de mayor vulnerabilidad en la ciudad, no solo por el tema de movilidad, sino porque los indicadores a nivel de conductores, pasajeros y personas que han sido atropelladas por este vehículo, cada día van en crecimiento y no demuestran una disminución. “Esto obviamente nos preocupa y nos muestra que son muchos los factores que se presentan en el alto índice de accidentalidad en las motocicletas”, agregó Bejarano.

Normas de tránsito… ¿Letra muerta?
A pesar de todas las normas y códigos de tránsito que hay, los motociclistas siguen infringiéndolas. Como si la Ley se hiciera para infringirla. Como si fuera letra muerta.

Vivimos en una sociedad que se autorregula a través de los diferentes individuos en un proceso o esquema normativo. Colombia tiene como ‘Ley de leyes’ la Constitución de la República y tiene una serie de normas para el caso de la movilidad y el tema de seguridad vial que es el Código Nacional de Tránsito. Bejarano, habla de tres aspectos fundamentales en cuanto a la accidentalidad: en primer lugar, el aspecto de educación y capacitación. “Infortunadamente en el tema de motociclistas más del 86% de los conductores de motos a través de un estudio que adelantó el Fondo de Prevención Vial en el 2005 encontramos que nunca habían asistido a una escuela de capacitación para formarse como conductores de motocicleta. La mayor parte aprendió porque le enseñó un amigo o aprendió solo”.

Lo otro, es un proceso de cultura ciudadana que se vive desde la misma escuela o colegio. “Infortunadamente es una de las luchas que hemos querido dar nosotros aquí en la ciudad de Neiva, para que se establezca la cátedra de seguridad vial de manera obligatoria y a nivel transversal en todos los colegios y escuelas de la ciudad de Neiva. Que el niño, no solo en la ciudad, sino en el departamento y en Colombia, desde pre-jardín ya esté ejerciendo conductas y comportamientos preventivos”. Y lo tercero, obviamente la función que deben cumplir las autoridades. “En el cado de las administrativas, en pensar en el Plan de Ordenamiento Territorial, para diseñar una ciudad en términos de seguridad, de movilidad, pero que nos permita generar seguridad vial”, concluyó el funcionario del Fondo de Prevención Vial.

Las causas…
Son muchas: el conducir en estado de embriaguez, no usar casco, no ponerse el chaleco reflectivo, adelantar por la derecha, etc. –dijo Marlon Mauricio Bermeo, Jefe de Seguridad y Educación Vial de Neiva- y agregó, “es por eso que estamos ejerciendo un control fuerte para controlar y dar cumplimiento a los decretos 100 y 1147 que no permiten que las personas transiten en moto después de las 11 de la noche, ni tampoco que estén estacionados en cualquier vía pública de la ciudad”.

Por otro lado, y apoyando lo dicho por Bejarano, el director territorial del Ministerio de Transporte para la Regional Huila-Caquetá, Jairo Octavio Poveda, hizo referencia a la impericia como causa fundamental de los accidentes de tránsito en moto. Esto se debe a la facilidad de conseguir la licencia de conducción, y si la persona no ha hecho ningún curso, desde luego sigue siendo un aprendiz, un neófito que anda por las calles de la ciudad sin Dios, ni Ley. A pesar de que la persona esté montada en el aparato, no tendrá la capacidad y versatilidad para conducir.

Según la investigación realizada por la Cola del ratón, una de las causas que sigue primando en los accidentes de tránsito es el alicoramiento de los motociclistas. Cada año más de un millón de personas en el mundo mueren por accidentes de tránsito y la mayoría de esas muertes están relacionadas con el exceso de alcohol. Hasta el mes de agosto se había presentado 453 accidentes de motos en la ciudad y la causa principal: la embriaguez de los motorizados.

La velocidad mata
El exceso de grasa daña el organismo, el exceso de azúcar enferma, el exceso de alcohol es nocivo para la salud… todos los excesos matan. Y el exceso de velocidad también. Cada día 140 mil personas se accidentan en las calles y carreteras del mundo, 3 mil mueren y 15 mil quedan discapacitadas de por vida. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el año 2020 los accidentes de tránsito serán la tercera causa de muerte en el mundo, más que las enfermedades mentales o del corazón.

Según el Fondo de Prevención Vial, en Colombia acrecentarán los riesgos de accidentalidad después de aprobado en el Congreso de la República el proyecto que permitió el aumento de velocidad en vías urbanas y carreteras nacionales, llevando a un acrecimiento de las cifras de muertos y heridos. Según estudios presentados por la OMS, como el denominado ‘Power Model’, indican que el incremento de la velocidad en carretera conlleva un aumento en el número de muertos y heridos por accidentes de tránsito. Así lo advirtió categóricamente Bejarano, quien prendió las alarmas sobre el proyecto de ley aprobado.

El funcionario rechazó el aumento de velocidades propuesto en el proyecto de ley 212 de 2007, el cual permite a la autoridad de tránsito competente para limitar hasta en 80 kilómetros/hora los límites máximos en vías urbanas. En el caso de carreteras nacionales y departamentales, dichas velocidades serían fijadas por el Ministerio de Transporte o la autoridad departamental competente, sin que puedan exceder los 120 kilómetros/hora, esto sería catastrófico, ya que si se presentan tantos accidentes con tan solo 80/hora en carreteras nacionales y 60/hora en urbanas ¿cómo será ahora?

El estudio denominado ‘Power Model’ señala que un incremento de la velocidad promedio de un 5% conlleva un aumento en el número de muertos del 20% y de heridos del 10%. Por lo tanto, si en el 2007 se registraron en Colombia 5.409 muertos en accidentes de tránsito, con este proyecto y de acuerdo con las estadísticas, el número de víctimas fatales podría ser superior a las 6.400 personas en un año.

La accidentalidad en las calles y carreteras le cuesta anualmente a Colombia 1.400 millones de pesos, según un informe del Ministerio de Transporte; con ese dinero se podrían construir 100 escuelas o cuatro sistemas masivos de transporte.

‘Las mal llamadas escuelas de enseñanza’
-Buenos días joven, en que le puedo servir
-Señorita ¿qué tengo que hacer para sacar el pase de la moto?
-Si no sabe manejar, tiene que hacer el curso, por mucho, 10 clases…
-¿Y cuanto vale?
-Aquí le cuesta 230 mil con el examen médico.
-¿Y que tengo que hacer?
-Usted viene, nos trae los papeles requeridos… La fotocopia de la cédula, Dos fotos 3x4 fondo azul y el tipo de sangre, no más…
-¿No es más?
-No, solo tiene que presentar el examen médico y ya.

Esta conversación se llevó a cabo en la escuela de conducción Autorraly. Y quedó clara la facilidad a la hora de conseguir una licencia de conducción. Gina Paola Lemus, de la academia, dijo que para hacer el curso de moto por lo general se inicia con dos clases- sería hora y media- de allí en adelante depende del concepto que dé el instructor como tal. Y si la persona nunca ha manejado, son 10 clases y se le otorga el certificado de escuela. “La licencia de conducción se hace cuando la persona no tiene tiempo para hacer el trámite, aquí le ayudamos a la persona”.

El inconveniente es que la mayoría de escuelas de enseñanza de la ciudad no están cumpliendo con la ley que dice que son 20 horas de capacitación, además de un examen físico-técnico. Otro inconveniente es que las escuelas no pueden dar licencias, según Bejarano. Y lo peor de todo es que el problema de la falsificación de licencias ya no se está presentando tanto con los tramitadores, que desde luego es un riesgo, sino en estas mal llamadas escuelas de capacitación.

Esta mala experiencia la vivió el motorista Andrés Losada Torres, según él, prestó su motocicleta y a quien la facilitó se la quitaron porque tenía la licencia falsa. Pero para sorpresa suya a la hora de sacar la moto de los patios resultó que la suya también estaba ‘chiviada’ a pesar de que la había sacado por una escuela de conducción. “Tengo más de dos años con la moto y me habían parado infinidad de veces los guardas de tránsito, y nunca me dijeron nada. Pero cuando fui a sacar la moto, un policía de transito me dijo que era falsa y con él mismo lo corroboramos en Internet. Yo me había confiado porque era de una escuela, no había sacado la licencia con tramitador por el riesgo de que saliera falsa, pero de todas maneras, con escuela y todo, me salió lo mismo”.

Hay una normatividad específica que es el acuerdo 0051 del 93 el cual establece una serie de regulaciones y parámetros para dichos centros, hoy día, mal llamadas escuelas de capacitación automovilística. Sí estas escuelas no están cumpliendo con lo que establece la Ley serán sancionadas por la Superintendencia de Puertos y Transporte, con la suspensión de la habilitación de la escuela o la cancelación definitiva. Pero mientras tanto ¿Qué pasará con estos centros de enseñanza?

No más estrellas negras
La posibilidad de disminuir la accidentalidad no es tan difícil, se requiere ser aplicados; las autoridades y todos los que tienen que ver con la seguridad deben ejercer bien el papel que les corresponde. Se podría pensar en algunas alternativas: uno, dejar carriles exclusivos para motos; dos, pensar que las motos no puedan adelantar vehículo alguno; y por último… Aquí se creo en alguna administración la ciclo ruta, ¿tenía sentido, servía para algo? Simplemente se hacen inversiones pero no hay continuidad ni compromiso de las administraciones para hacer un trabajo que eduque a la ciudadanía. Y esta educación es precisamente lo que hace falta: vigilar, forzar y reprimir a quien no esté cumpliendo la normatividad existente.

Mientras aquí no se haga nada se seguirán viendo las calles de la ciudad llenas de estrellas negras. Debe haber un compromiso de todos: las autoridades, para que hagan cumplir la Ley; los motociclistas, para que tengan más cuidado al andar por las calles y cumplan las normas de tránsito y los que piensan sacar la licencia por estos días, que abran bien sus ojos y no se dejen tumbar, así las vayan a sacar con tramitador o por escuela de conducción.